Bottoms up! Los excesos culinarios típicos de Navidad suelen pa-sarnos factura. Si vemos que empieza a costar ajustarse el cinturón o que la laxitud hace acto de presencia, lo me-jor es poner remedio cuanto antes. Para ello, nada como hacer ejercicio: al aire libre, en el gimnasio o, incluso, en casa utilizando diferentes herramientas que se converti-rán en nuestras mejores aliadas. En forma