La seguridad vial es un factor determinante para el bienestar de la sociedad. Por eso, todos debemos tener presentes las graves consecuencias que tienen los accidentes de tráfico, en especial aquellos causados por distracciones al volante, siendo la muerte la consecuencia más extrema.
El 30% de los accidentes de tráfico están causados por distracciones al volante de todo tipo. El uso del teléfono móvil es una de las causas más comunes, aunque no hay que olvidar otras como el uso del navegador, distracciones mirando el paisaje, conducir fumando, comiendo o bebiendo o circular por una carretera monótona.
En este sentido, uno de los fenómenos más intrigantes que se dan al conducir es el de la hipnosis de la carretera. Se le llama así al momento en el que el conductor de un vehículo conduce y toma decisiones por inercia de manera correcta y unos segundos más adelante no recuerda haberlo hecho. Esto ocurre sobre todo en carreteras monótonas o que ya son conocidas por el conductor y no le requieren, a priori, de especial atención.
¿Por qué se produce la hipnosis de la carretera?
Hipnosis de la carretera, también llamada fiebre de la línea blanca, es una anormalidad que sufren algunos conductores de turismos, camiones y motocicletas y que comenzó a estudiarse a mediados del siglo XX.
Pero, ¿por qué se produce este efecto? Su principal causa es el estado mental en el que caemos como consecuencia de que el patrón de movimiento y estímulos durante la conducción es totalmente predecible. Es una manifestación del proceso común de la automaticidad, donde las mentes conscientes e inconscientes son capaces de concentrarse en cosas diferentes. Los conductores que han pasado por esta situación han vivido una sensación en la que, de repente, parecen despertar de un trance y les es imposible recordar qué ha pasado en los últimos segundos.
En resumen, la actividad cerebral es más lenta y disminuye la frecuencia con que las diferentes partes del cerebro se comunican entre sí como consecuencia del aburrimiento, de hacer recorridos habituales por vías muy rectas o conducir de noche. En este sentido, la fatiga y/o el cansancio pueden contribuir a sufrir la hipnosis de la carretera.
Medidas de prevención contra la fatiga
No podemos evitar algunos accidentes, pero sí podemos evitar los riesgos derivados de conducir cansados en la carretera. Algunas de las medidas de prevención para luchar contra la fatiga son: planificar el viaje con paradas cada dos horas, mantenernos hidratados en todo momento y contar con una temperatura agradable en el vehículo (24ºC). Por otra parte, podemos hacer un buen uso de la tecnología, con algunos de los sistemas para reconocer la somnolencia y la falta de concentración al volante mediante sensores en el volante y cámaras de reconocimiento facial.
Cumplir con todas estas recomendaciones, así como prestar especial cuidado cuando se transita por los tramos más peligrosos de la red viaria, ayuda a prevenir un posible accidente. Viajar con tranquilidad también puede evitar tener un percance. En este sentido, contar con un seguro de automóvil te aportará la tranquilidad y seguridad que precisáis tu y los tuyos en cada uno de los desplazamientos.