
- ¿Picores en la piel después de la ducha? Es probable que sufras un prurito acuagénico.
- Es importante someterse a un examen médico cuando aparezcan síntomas de picor después de la ducha.
- Entre todos los remedios caseros, destaca el secarse bien justo después de haber terminado la ducha y rápidamente vestirse con ropa de calle.
Si alguna vez has sentido picores después de la ducha, es posible que se deba al prurito acuagénico. Aunque no es una condición muy común, muchas de las personas que lo padecen atribuyen sus síntomas a otros factores como el cloro, la piel sensible o el pH del gel que utilizan.
Por suerte, el prurito acuagénico no es grave, aunque los picores en la piel pueden llegar a ser muy molestos. Por eso, en este artículo te indicamos las principales causas del prurito acuagénico y los mejores remedios caseros para aliviar el picor de la piel.
¿Qué es el prurito acuagénico y cuáles son sus causas?
El prurito acuagénico puede definirse como una sensación intensa de picor tras el contacto con el agua a cualquier temperatura. Aunque no produce cambios visibles en la piel, puede generar síntomas durante una hora o más. En general, la picazón afecta con mayor intensidad a las piernas y los brazos, mientras que no suele afectar a la cabeza o las palmas de las manos y los pies.
Aunque en ocasiones sus síntomas aparecen en varios miembros de la misma familia, se desconoce la causa exacta del prurito acuagénico. Algunas de las hipótesis para explicar su aparición relacionan los picores con el aumento de componentes bioquímicos como la histamina o la acetilcolina, aunque en otros casos puede aparecer como síntoma de la policitemia vera.
Por su relación con otras enfermedades, es importante someterse a un examen médico cuando aparezcan síntomas de picor después de la ducha. El diagnóstico descartará condiciones más graves, como la ya mencionada policitemia o las urticarias debidas a estímulos físicos.
El prurito acuagénico puede definirse como una sensación intensa de picor tras el contacto con el agua a cualquier temperatura.
¿Cómo tratar los picores en la piel después de la ducha?
El tratamiento del prurito depende de los resultados del análisis médico. Al desconocerse su causa exacta, es difícil determinar el tratamiento más adecuado.
En cualquier caso, se han probado con cierto éxito varios tipos de terapia para el prurito acuagénico. Los antihistamínicos para el picor de piel son el método principal para aliviar los síntomas, pero también destaca la aplicación de fototerapia con rayos UVB, los inhibidores de recaptación de serotonina o el uso de agua de baño con bicarbonato sódico.
Tratamiento y remedios para el picor de piel después de la ducha
A pesar de que los anteriores métodos pueden funcionar, es importante consultar con un dermatólogo antes de automedicarse. Afortunadamente, existen algunos remedios caseros para el picor de piel que podemos utilizar mientras nuestro médico de confianza estudia el mejor tratamiento.
Entre todos estos remedios caseros que a continuación pasamos a explicar, destacan dos. El primero consiste en, una vez terminada la ducha, secarse bien y rápidamente vestirse a ser posible con ropa de calle. Por normal general la ropa de casa es más holgada y lo que queremos aquí es que las prendas estén en contacto con la piel para que esta pueda volver a su temperatura normal. Recordemos que una de las posibles causas del prurito acuagénico es el cambio de temperatura.
Incidiendo en la misma línea, algunos usuarios hablan de usar toallas calientes para secarse. Puedes dejar la toalla en el radiador encendido mientras te duchas o cambiarlo por un radiador-toallero.
Además de esto, contamos con estos otros remedios caseros que también podrían ayudar:
- Avena: La avena coloidal es hidratante y regeneradora. Sus propiedades ayudan a calmar el picor y reducir la inflamación en la piel. Para utilizarla, basta con poner agua a hervir y añadir unas cucharadas de avena, aplicándola en la piel afectada después de que haya reposado media hora.
- Menta: Ingerida, la menta puede ayudar a calmar problemas digestivos, pero también puede aplicarse sobre la piel para reducir síntomas de prurito. Su aplicación es similar a la de la avena: se añaden dos o tres cucharadas de menta en una taza de agua caliente y, después de colar el agua, se aplica sobre la piel.
- Bicarbonato de sodio: Como ya hemos mencionado, la alcalinidad del bicarbonato sódico puede ayudar a regular el pH de la piel. Se puede aplicar en baños o mezclarlo con algún aceite vegetal, haciendo una crema y aplicándola sobre la piel con agua templada.
- Aloe vera: El aloe vera es un calmante natural y se utiliza con mucha frecuencia en productos farmacéuticos para calmar el picor y acelerar la cicatrización. Sus propiedades están presentes tanto en la planta como en el gel de aloe vera, y basta con aplicarlo directamente sobre la piel.
Además de estos remedios caseros, también existen otras opciones como la melatonina, la arcilla verde o el vinagre de sidra de manzana.
Cuenta con la ayuda de un profesional ante el prurito en la piel
Todos los anteriores tratamientos pueden ser de gran ayuda para reducir el malestar producido por el prurito acuagénico. Sin embargo, cabe recordar que lo más importante es someterse a una evaluación completa por parte de un médico para averiguar el motivo que ha producido los picores.
La atención médica profesional es imprescindible, en especial porque los picores en la piel pueden deberse a razones muy distintas. En el peor de los casos, el picor puede ser un síntoma de una condición más seria, por lo que recomendamos ponerse en manos de un especialista cuanto antes.
Afortunadamente, la cobertura de Bienestar y Salud de Occident pone a tu disposición un cuadro de profesionales de la dermatología. Ellos se encargarán de darte asistencia especializada y ayudarte a conseguir el mejor tratamiento.
Recibe un diagnóstico profesional
Si notas síntomas que podrían relacionarse con el prurito acuagénico, es importante no autodiagnosticarse. Los picores después de la ducha pueden ser completamente benignos, o deberse a alguna otra condición como la urticaria o incluso el estrés.
Por ese motivo, recurrir a antihistamínicos de inmediato no es buena idea: asegúrate de tomar la medicación recomendada por un dermatólogo profesional. Entre tanto, utilizar remedios caseros puede ayudarte, aunque en ningún caso resuelve el problema subyacente. El único remedio definitivo contra el prurito acuagénico es, sin duda, ponerse en manos de los profesionales de tu seguro.