Llevar el patinete eléctrico es una forma cómoda y práctica de combinar trayectos en transporte público y en tu propio medio personal. Pero, ¿es posible hacerlo? Es útil informarse previamente sobre la normativa para que no haya ningún problema.
Normativas para llevar un patinete eléctrico en el tren
Las dudas sobre la posibilidad de viajar en tren con patinete eléctrico se producen por la medida temporal que adoptaron algunas comunidades autónomas Comenzaron a aplicarse a la espera de que la nueva normativa sobre vehículos de movilidad personal se desarrollara en profundidad.
En octubre de 2023, un patinete eléctrico explotó en el metro de Madrid y tuvo una de sus líneas detenidas durante 3 horas, aunque no hubo daños personales que lamentar, afortunadamente. Noticias como esta ayudan a entender el porqué de estas nuevas políticas restrictivas pero, ¿son aplicables en todos los trenes?
Renfe
Renfe no permite el acceso a sus trenes con patinetes, monociclos eléctricos y vehículos similares, pero tienes otras alternativas si quieres combinar el uso de transporte público y vehículo propio.
En Cercanías, por ejemplo, puedes viajar con una bicicleta y colocarla en los espacios habilitados, a no ser que la ocupación sea muy elevada. En ese caso, podrías esperar otro tren, solicitar que te devuelvan el importe del billete o dejarla en un parking habilitado en la estación.
Renfe Avlo
La prohibición de acceso con patinetes eléctricos y similares afecta a todos los trenes de Renfe, por lo que tampoco puedes subir tu vehículo a un Avlo.
En estos trenes, solo están permitidas las bicicletas y patinetes no eléctricos plegados y en su funda de transporte. Si no supera los 55x35x25 cm puedes transportarlo gratuitamente con la tarifa básica. Si es mayor, no olvides adquirir el extra de equipaje adicional al comprar el billete.
AVE
En el AVE no se permite llevar patinetes eléctricos, ni tampoco en los trenes Avant y AVE Internacional, ni en los de larga distancia como Alvia, Intercity o Euromed.
La alternativa es llevar una bicicleta o patinete no eléctrico plegado o desmontado y en su funda. Si no supera los 180 cm, se considera equipaje de mano; de lo contrario, se clasifica como equipaje especial y se debe abonar el suplemento correspondiente a las bicicletas.
Excepciones de la normativa
Las bicicletas eléctricas y los vehículos para personas con movilidad reducida están exentos de esta normativa, por lo que está permitido llevarlos en el tren.
Las restricciones se implementaron inicialmente de forma temporal y de manera desigual entre las comunidades autónomas. A día de hoy, sin embargo, la prohibición se ha extendido a todo el transporte público, y no se limita únicamente a los trenes.
La Comunidad de Madrid, por ejemplo, prolongó la prohibición hasta 2027, abarcando el metro, los autobuses urbanos e interurbanos, los intercambiadores y el tranvía de Parla.
En Cataluña también se extendió indefinidamente la prohibición de llevar patinetes y monociclos eléctricos en el transporte público. La Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM) del área de Barcelona consideraba que había un riesgo bajo, pero severo.
Otro ejemplo es el de Andalucía. Al igual que las comunidades mencionadas, el 1 de enero de 2024 hacía efectiva la prohibición de acceso al transporte público con vehículos de movilidad personal eléctricos.
Sanciones al incumplir las normas del patinete eléctrico en el tren
Llevar un monociclo, patinete eléctrico o similar puede conllevar una sanción de 200 €, según informa Rodalies de Catalunya. Cada comunidad autónoma tiene la facultad de establecer su propia sanción.
Desplázate tú y tu vehículo de movilidad personal sin incidentes
Las explosiones de patinetes eléctricos son poco frecuentes y, además, se espera que la nueva normativa que se aplica a los vehículos de movilidad personal mejore la seguridad. La prohibición de llevar patinetes eléctricos en el tren se debe a que, aunque el riesgo de incidente es bajo, las consecuencias pueden ser graves debido a la cantidad de personas afectadas en un espacio cerrado y reducido.
Para minimizar cualquier riesgo, además de dar a tu patinete un buen mantenimiento, es muy útil contar con un seguro para VPM. Cuenta con cobertura de responsabilidad civil si se producen daños a terceros en caso de accidente. Además, cubre los costes de reparación del vehículo y te reembolsa el máximo valor en caso de robo, expoliación o incendio.