Viajar en coche tiene el gran atractivo de la libertad de horarios, la flexibilidad y poder ir por rutas a las que no llega el transporte público para descubrir lugares menos turísticos. Sin embargo, también conlleva responsabilidad.
La asistencia en carretera en el extranjero, por ejemplo, adquiere un significado incluso más importante que en el país de residencia habitual, ya que la falta de conocidos cercanos o el idioma pueden crearnos incertidumbre. Para que una avería sencilla no se convierta en toda una odisea que enturbie tu viaje, te damos algunos consejos.
Viaja tranquilo y recorre mundo con la asistencia en viaje de tu seguro de coche
Si eres de los que prefiere llevar tu coche a esa ruta por la costa italiana o por los palacios y castillos franceses, es porque te gusta la carretera y la libertad que te ofrece este modo de viajar. Lamentablemente, salir con el coche implica asumir que puede surgir un incidente en cualquier momento, sea un trayecto corto al trabajo o mientras haces esa ruta que has preparado con tanta ilusión.
La asistencia en carretera en el extranjero te ofrece un soporte que evita que surjan esos miedos, o al menos te den tranquilidad. Tu seguro te puede enviar una grúa, suministrarte combustible o repatriar tu coche o a sus ocupantes si tiene que hacerlo.
¿Qué beneficios te aporta la asistencia en carretera en el extranjero?
La asistencia en carretera es uno de los servicios más utilizados y valorados de los seguros de coche, y puede actuar también cuando te encuentras en el extranjero. Estos son algunos de los ejemplos de lo que puede proporcionarte:
- Ayuda técnica para poder seguir circulando.
- Remolque con grúa hasta un taller.
- Rescate por vuelco o caída en desnivel.
- Envío de combustible, piezas de recambio o llave duplicada.
- Defensa jurídica.
¿Qué sucede con los ocupantes?
El servicio de asistencia en carretera en el extranjero también cubre a tus acompañantes. Un contratiempo les afectará tanto como a ti, así que el seguro también puede ayudar en estas situaciones. Algunos ejemplos de lo que puede hacer por vosotros son:
- Cubrir gastos de hotel o transporte ante la inmovilización del vehículo por avería o accidente.
- Transportar o repatriar heridos y enfermos a un hospital o a su domicilio.
- Cubrir los gastos de desplazamiento de un familiar para que acompañe a un enfermo o herido en el hospital.
- Ocuparse de gastos médicos, quirúrgicos, farmacéuticos y de hospitalización, según los límites de la póliza.
- Cubrir los gastos de un regreso anticipado si fallece un familiar en España.
- Buscar y transportar vuestros equipajes y efectos personales, si es necesario.
Protégete bien antes de salir de tu país
No hay mejor forma de disfrutar de un viaje que prepararlo con mimo, pero eso no solo implica pasar horas frente a mapas y guías de viaje. Te recomendamos realizar otras tareas imprescindibles para que todo salga bien.
Consulta tu cobertura
Hemos puesto algunos ejemplos de lo que un seguro de coche puede hacer por ti si necesitas asistencia en carretera en el extranjero, pero todo depende de tu póliza. La asistencia internacional puede no estar incluida de serie o, en caso de estarlo, tener coberturas muy básicas.
Te recomendamos revisar a conciencia las condiciones y, en caso de dudas, llamar a la compañía aseguradora para que te ayuden a resolverlas.
Pon a punto el vehículo
La DGT recomienda realizar una serie de comprobaciones en el vehículo antes de salir de viaje: revisar la batería, las ruedas y neumáticos, el lavaparabrisas y limpiaparabrisas, los frenos, el aceite y engrase y el sistema de refrigeración.
Además de los detalles técnicos, también es recomendable velar por el estado del conductor, la instalación y el confort de los viajeros, la colocación correcta de cargas, equipaje y animales y la preparación de itinerarios y horas de salida.
Infórmate sobre las normativas locales
Cada país aplica sus normas de tráfico, desde los límites de velocidad a las prohibiciones de circulación en ciertas áreas. Una forma de conocerlas antes de viajar es visitar la web del Ministerio de Asuntos Exteriores, que ofrece información útil para recomendaciones de viaje.
Por ejemplo, si viajas a Alemania, puedes consultar el apartado “Otros” para conocer algunas indicaciones de seguridad vial. Una peculiaridad de este país es que está prohibido circular en los centros de muchas ciudades si no se dispone de una placa especial que asegure que se cumplen una serie de condiciones medioambientales. La placa puede adquirirse en las estaciones de la ITV alemana y muchos talleres a un precio económico.
Adapta tu conducción
Además de tener sus propias normas, cada zona tiene una orografía y unas carreteras distintas. Hay que ir siempre atento y a la velocidad permitida, incluso por debajo del límite para ver bien las señales y mantener la distancia adecuada. Ese nivel de atención puede generar más fatiga de la habitual cuando conduces, lo que se suma al cansancio propio del viaje, así que reserva tiempo suficiente para descansar.
En definitiva, para convertir tu viaje en esa experiencia gratificante que buscas, aprovecha servicios tan útiles como el de asistencia en carretera en el extranjero. Comprueba tu póliza, revisa tu vehículo, consulta la normativa del país y disfruta de los kilómetros que tienes por delante.
