Aun muchos trabajadores afectados por el ERTE no han cobrado desde que este se tramitó en marzo de 2020. Una situación que se repite en otros afectados por la ampliación de ERTES, cuya prórroga más reciente se alargó hasta el pasado mes de mayo. ¿Cómo conseguir el pago de estas prestaciones?
Según las cifras del Consejo General de los colegios de Gestores Administrativos, aún contamos con alrededor de 900.000 personas que aún no han cobrado su prestación por ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo).
La buena noticia es que es posible reclamar los ERTEs sin cobrar al Servicio Público de EmpleoEstatal (SEPE). La mala noticia es que tal vez debas tener algo de paciencia, ya que en algunos casos el trámite puede complicarse.
Debido a que los retrasos en los cobros se van acumulando desde que se aprobó la primera oleada de ERTEs durante el confinamiento masivo por el COVID, las quejas no han parado de crecer.
Con este motivo, y con el fin de reducir el colapso, tienes varias opciones para reclamar el cobro del ERTE. No obstante, primero debes comprobar que han pasado 30 días desde que se solicitó la prestación para poder interponer la reclamación.
Por un lado, puedes pedir cita previa y hacer tu reclamación vía presencial a la oficina del SEPE más cercana.
Por otro lado, el SEPE ha habilitado un correo electrónico para que los afectados puedan trasladar su situación y poder gestionar el cobro de las prestaciones. El correo electrónico es miprestacion2020@sepe.es.
Una vez hecho esto, si en el plazo de 45 días después de presentar la reclamación no recibes respuesta alguna o te deniegan la prestación, podrás llevar a cabo una reclamación previa. Se denomina reclamación previa porque es lo que necesitarás hacer antes de poner una demanda al SEPE por la vía del Juzgado de lo Social.
En la reclamación previa deberás presentar de forma clara:
Para presentar una reclamación previa podrás hacerlo vía presencial (con cita previa) en el SEPE o a través de su página web (mediante DNI electrónico o certificado digital).
Ten en cuenta que este procedimiento es legal e importante, por lo que es recomendable contar con el asesoramiento de un graduado social, un abogado de oficio o el que tú mismo elijas por la vía privada.
Una vez presentado este recurso, hay un plazo de seis meses para que el SEPE responda. Si no lo hace, entonces se considera silencio administrativo y, por tanto, podremos recurrir a la demanda judicial.
Esperamos que no tengas que llegar a este paso y puedas resolver eficazmente tu caso.