Cuando adquieres un local suele ser con el motivo de sacarle rentabilidad, ya sea alquilándolo o dándole un uso. Por lo tanto, disponer de un local vacío suele ser sinónimo de estar perdiendo una inversión realizada. Si no tienes ideas sobre qué hacer con un local vacío, vamos a intentar ayudarte.
Los locales generalmente se utilizan para implantar un negocio. Desde el momento de su construcción, estos espacios ya tienen asignado un uso específico. Este uso se puede conocer consultando las escrituras o el proyecto de construcción del edificio. El uso puede ser desde:
Este uso se puede modificar, realizando un proyecto y solicitando una licencia de actividad al ayuntamiento donde está ubicado el local.
Por lo tanto, el primer paso es tener en cuenta esto: ¿qué permite la licencia vigente? Si la licencia de tu local no te convence, es posible cambiarla realizando los trámites correspondientes.
Conociendo la licencia y habiendo evaluado si cambiarla o no, es posible hacer un análisis sobre la situación del local para elegir la opción que más te convenga.
Entre los aspectos a analizar está su ubicación y los negocios que hay alrededor. No es lo mismo pensar en un uso para un local localizado en una calle peatonal que uno que esté en una calle secundaria. Otro aspecto importante es explorar a fondo el local en sí para averiguar cuál es la mejor opción según sus características técnicas.
Independientemente de las conclusiones extraídas del análisis inicial, un local puede utilizarse para muchas cosas, desde negocios hasta para uso personal:
El uso más habitual para un local suele ser para ubicar un comercio, es decir, una tienda o un bar.
Aunque puede que no sea el uso más habitual, ya que suelen estar ubicadas habitualmente en entreplantas o primeros pisos, un local se puede destinar a oficina.
Convertir un local en varios trasteros y hacer de ello un negocio es una práctica muy interesante para locales que no tengan una buena ubicación. Cada vez es más habitual encontrar lugares de este tipo, donde cualquier persona puede alquilar una porción de un local para guardar sus cosas.
Esta es una opción viable, pero puede que sea la más compleja. Si tu local no está construido de manera específica para ser un garaje, es complicado que puedas adaptarlo para que tenga este uso. Pero, puede ser una buena opción en barrios residenciales o en edificios que no tengan sótanos y tengan rampa y gual permanente.
Aunque no es habitual que una vivienda esté ubicada en el bajo de un edificio, es una opción muy rentable. En este caso será muy importante el hecho de que, además de la licencia, el local-vivienda disponga de cédula de habitabilidad y certificado energético.
Si el local está en un buen lugar para ser una vivienda, también puedes valorar la opción de convertirlo en un apartamento turístico, o similar, y alquilarlo. Esta idea puede ser muy rentable en lugares que viven del turismo o en grandes ciudades.
Un local vacío puede ser muy rentable, dependiendo de su ubicación y de los negocios y viviendas que lo rodean. Realizando un estudio al respecto y considerando las opciones que permite el local, encontrarás el modelo ideal para poder aprovechar tu local vacío.