Si eres autónomo seguro que ya sabes que la cantidad que facturas por prestar tus servicios no es la cantidad real con la que vas a contar, ya que hay que restarle toda una serie de gastos: impuestos, cuotas, gastos de actividad… Y tú, ¿quieres saber cuál es tu sueldo neto mensual como trabajador por cuenta propia? A continuación te explicamos cómo funciona la calculadora del sueldo neto de un autónomo.
Para calcular el sueldo neto que cobras como autónomo lo primero es tener clara la diferencia entre el sueldo neto y el sueldo bruto: el sueldo bruto es el total que cobras por tu trabajo, o sea, el total que tus clientes te pagan por tus servicios. Por otro lado, el sueldo neto es la resta del total que cobras menos los impuestos (IVA e IRPF), la cuota de autónomo y los gastos que genere tu negocio por llevar a cabo su actividad.
A continuación vamos a ver cada uno de estos gastos uno por uno.
A la hora de calcular el sueldo neto de un autónomo hay que tener en cuenta dos tributos:
El primero es el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA), un impuesto que se descontará de tu factura cuando lo declares. Su importe dependerá del lugar donde se realice la facturación (en la Península, en Ceuta o Melilla o en las Islas Canarias) y del tipo de producto o servicio con el que trabajes:
Por otra parte, también tendrás que tener en cuenta el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), que grava las ganancias de los autónomos. Ten en cuenta que no todos los autónomos pagan IRPF:
Para saber cuánto debes pagar como autónomo de IRPF tienes que tener en cuenta varios factores: el tipo de actividad que desarrollas, el sector en el que trabajas, su facturación y su antigüedad.
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El segundo elemento que tiene en cuenta la calculadora del sueldo neto de un autónomo son las cuotas a la Seguridad Social. Estas variarán dependiendo de la base de cotización por la que decidas declarar. Ten en cuenta que:
Por último, también tendrás que tener en cuenta los gastos fijos y variables que pagas mes a mes para que tu negocio pueda funcionar.
Ahora que ya conoces todos los gastos que tendrías que descontar de tus facturas mensuales, es hora de pasar a la operación: debes restarle a la base imponible de tus productos o servicios vendidos (o sea, al precio de venta original) la cantidad correspondiente al IVA y al IRPF, y después sumar todas las facturas del mes, con el impuesto ya descontado. A esa cantidad debes descontarle tu cuota de autónomo y los gastos mensuales (fijos y aquellos variables que estimes). La cantidad que obtengas será tu sueldo real.