La osteopenia y la osteoporosis son dos condiciones relacionadas con la densidad ósea que forman parte del mismo proceso, aunque la osteopenia representa un grado más leve que la osteoporosis. Dado que son afecciones relacionadas y muy similares, es normal que te preguntes: ¿cuál es la diferencia entre la osteopenia y la osteoporosis?, ¿tienen los mismos síntomas? y ¿cómo se pueden tratar?
Sigue leyendo este artículo para descubrir las respuestas y conocer el mejor tratamiento para mantener tus huesos fuertes.
La osteoporosis es una enfermedad que provoca el adelgazamiento y debilitamiento de los huesos, lo que conlleva una reducción de la densidad ósea. Durante esta afección, los huesos se vuelven más porosos, aumentando el número y tamaño de las cavidades de su interior, lo que los hace más frágiles, y propensos a fracturas.
Por otro lado, la osteopenia, a diferencia de la osteoporosis, no se considera una enfermedad, sino una afección similar pero más leve. Las personas con osteopenia presentan una disminución de los minerales óseos en comparación con la densidad normal de los huesos, lo que provoca debilidad y afecta a la masa ósea y su densidad.
Las causas más comunes de la osteopenia y la osteoporosis son factores genéticos, un estilo de vida sedentario, deficiencia de vitamina D o calcio, hipertiroidismo, trastornos alimenticios, problemas metabólicos que afectan en la absorción de minerales y vitaminas, artritis reumatoide o diabetes tipo 1.
El objetivo del tratamiento tanto para la osteopenia como para la osteoporosis es reducir las fracturas debido a la fragilidad de los huesos. Para lograrlo, es necesario tomar medicamentos y cambiar hábitos para llevar un estilo de vida más saludable, lo que incluye la práctica regular de ejercicio.
Para prevenir la osteopenia y la osteoporosis, debes incluir en tu dieta alimentos ricos en vitamina C y D, así como minerales como calcio, magnesio y Omega 3. Veamos para qué sirve cada uno de ellos.
Tanto la osteopenia como la osteoporosis se consideran enfermedades silenciosas, sin embargo, un reumatólogo puede diagnosticarlas mediante diversos instrumentos. Agregar los alimentos que te hemos nombrado a tu dieta puede ayudarte a prevenir estas dos condiciones, pero no dudes en consultar a un profesional de la salud si sientes dolor o rigidez de articulaciones y espalda, pérdida de estatura a lo largo del tiempo o espalda encorvada.