El potasio es un mineral que el cuerpo necesita para realizar sus funciones básicas. Los músculos y el sistema nervioso lo precisan para funcionar correctamente, por lo que su ingesta en cantidades adecuadas es vital.
Las dietas bajas en potasio están recomendadas para personas con enfermedades como la insuficiencia renal, el cáncer de riñón y pacientes con cálculos renales entre otras. No obstante, no todas las afecciones son iguales, y no todas las personas con problemas renales precisan dietas para bajar los niveles de potasio en sangre. Por eso es importante que la cantidad de potasio que debe contener una dieta sea determinada por personal cualificado.
El potasio es un mineral muy importante para tu organismo y desempeña roles fundamentales como el mantenimiento de la salud celular y el equilibrio de líquidos en el cuerpo. Contribuye en la transmisión de los impulsos nerviosos, contracción muscular, función cardíaca normal y regulación de la presión arterial. Además, participa en la síntesis de proteínas y en el metabolismo de los carbohidratos.
El nivel de potasio se puede determinar con un simple análisis de sangre o análisis de potasio sérico. Los niveles normales se encuentran entre 3,6 y 5,2 miliequivalentes por litro.
Si tus niveles se encuentran por debajo de lo normal sufres hipopotasemia, y puedes tener debilidad muscular, letargo, latidos cardíacos irregulares y en algunos casos, llegar a la parálisis.
Por lo contrario, si tus niveles de potasio en sangre se encuentran por encima de lo normal, sufres hiperpotasemia. Entre los síntomas que puedes padecer en este caso encontramos debilidad muscular, palpitaciones, sensación de hormigueo y, en ciertos casos, parada cardíaca.
Hay ciertos alimentos famosos por su elevado contenido en potasio, como el plátano, pero lo cierto es que puedes encontrar este mineral en muchos otros productos de consumo diario, como algunas carnes, pescados y verduras.
Si tu médico o nutricionista te ha recomendado seguir una dieta baja en potasio, y quieres completarla con recetas de tu gusto, te animamos a conocer la lista de los alimentos más adecuados para elaborar un menú semanal bajo en potasio y validarlo con tu especialista.
Puedes adaptar recetas que ya conozcas evitando añadir en ellas ingredientes con alto contenido en potasio, como soja, salmón, carne magra de ternera, pistachos, aguacate, espinacas, manzanas, huevos, pepinillos, mantequilla y aceites vegetales.
La patata, el huevo y el calabacín pueden convertirse en tus mejores aliados en este tipo de dietas, ya que son alimentos bajos en potasio. Otro truco al que puedes recurrir es sustituir los alimentos integrales, como el arroz y el pan integral, por otros con un contenido menor en potasio y fósforo, como el pan y arroz blanco.
Igualmente deberás evitar los sustitutos de la sal, ya que contienen cloruro de potasio, así como otras sustancias habituales como la leche, el yogur y el café en polvo.
Otro consejo más que puede ser útil a la hora de preparar tu menú semanal bajo en potasio es tener en cuenta que el potasio es soluble en agua. Por eso, antes de consumir los alimentos, puedes eliminar parte del potasio que contienen con un gesto tan sencillo como poner a remojo y aclarar verduras, frutas y legumbres durante 12 a 24 horas, cambiándoles el agua 2 veces. De la misma forma, es importante no consumir el caldo de cocer, ni el almíbar de las frutas en conserva, que acumulan la mayor parte del mineral presente en estos alimentos.
Si por lo contrario, quieres aumentar tus niveles de potasio en sangre, incluye en tu dieta plátanos, naranjas, espinacas, tomates, aguacates, patatas y yogures.
Si estás pensando que llevar una dieta baja en potasio va a ser muy aburrido, te equivocas. Una dieta baja en potasio puede ser bastante variada, equilibrada e interesante. Aquí tienes unas cuantas ideas para realizar tres comidas diarias sin aburrirte:
Puedes modificar este menú semanal bajo en potasio añadiendo o cambiando ingredientes con contenidos de potasio bajos, similares a los de los ingredientes incluidos. Aunque, si lo que deseas es aumentar el potasio en sangre cambia tu menú añadiendo los alimentos que te ayuden a regularlo. Te recordamos que, antes de iniciar cualquier dieta, es conveniente consultar esta decisión con personal cualificado para evitar problemas nutricionales derivados de cambios alimentarios bruscos.