La menta ha sido utilizada en medicina tradicional durante siglos debido a sus propiedades. Probablemente por esta razón el té de menta es uno de los más consumidos, además de por su frescor. En este artículo, veremos algunos beneficios del té de menta y por qué debería formar parte habitual de tu dieta.
El té de menta: ¿cómo tomarlo?
El té de menta es una infusión popular y es tan conocida gracias a su refrescante sabor y aroma. Además de ser una bebida deliciosa, también ofrece una serie de beneficios para la salud debido a sus propiedades medicinales, gracias a compuestos como el mentol, la mentona y el mentofurano.
Para disfrutar de un buen té de menta, es recomendable utilizar hojas de menta frescas o bolsitas de té de menta. Para prepararlo:
- Añade agua caliente. Déjalo reposar durante unos minutos para que sus compuestos activos se liberen.
- Se puede añadir un toque dulce y natural, como por ejemplo con miel o estevia.
- También puedes combinarlo con otras hierbas, como con manzanilla y jengibre, para potenciar tanto el sabor como los beneficios.
- En épocas de calor, puedes tomar el té de menta frío, añadiendo hielo y alguna rodaja de limón: ¡una bebida de lo más refrescante!
¿Cuáles son los beneficios del té de menta?
El té de menta contiene sustancias como los polifenoles y los aceites esenciales, que son las responsables de aportar propiedades como:
- Alivia los problemas digestivos.
- Ayuda al sistema inmunitario.
- Reduce el estrés y la ansiedad.
- Alivia los dolores de cabeza.
- Mejora la salud bucodental.
- Puede ayudar a perder peso.
- Mejora de la salud respiratoria.
Alivia los problemas digestivos
- La menta es conocida por su capacidad de aliviar ciertos problemas digestivos. Es uno de los principales beneficios del té de menta, el ayudar con síntomas como la hinchazón, los calambres o el estreñimiento.
- Por otra parte, también es efectivo contra estos problemas por las propiedades antiespasmódicas que tiene, lo que da como resultado la posibilidad de relajar los músculos del tubo digestivo y aliviar las molestias.
- Así, beber té de menta después de las comidas también puede mejorar la digestión y reducir la probabilidad de indigestión y acidez estomacal.
Ayuda al sistema inmunitario
- Los antioxidantes son otro de los elementos que contiene el té de menta, lo que hace que el sistema inmune se vea reforzado.
- La menta también contiene ácido rosmarínico, que ha demostrado tener propiedades antiinflamatorias. Al reducir la inflamación del organismo, el té de menta puede mejorar la salud y el bienestar generales.
Reduce el estrés y la ansiedad
- El té de menta es una bebida que contiene mentol, un relajante muscular natural que ayuda a relajar los músculos y a calmar el organismo. Esto se traduce en que el té de menta ayuda a reducir tanto el estrés como la ansiedad.
- Beber una taza de té de menta antes de ir a la cama, también puede mejorar la calidad del sueño y ayudarte a despertar sintiéndote renovado y con energía.
Alivia los dolores de cabeza
- La menta es una planta que ha sido utilizada durante siglos como remedio natural contra el dolor de cabeza.
- El mentol del té de menta puede ayudar a reducir la tensión y aliviar el dolor.
- Beber té de menta con regularidad también puede ayudar a prevenir los dolores de cabeza.
Mejora la salud bucodental
- La salud dental se ve beneficiada con la menta, ya que tiene propiedades antimicrobianas que pueden ayudar a eliminar las bacterias de la boca.
- Tomar té de menta ayuda a reducir el riesgo de caries y enfermedades de las encías.
- Además, el sabor fresco y mentolado del té, también ayuda a refrescar el aliento y dejar la boca limpia y fresca.
Puede ayudar a perder peso
Incluir el té de menta en cualquier dieta es un gran acierto. Esta bebida tiene un efecto supresor natural del apetito, lo que puede ayudar a reducir el picar entre horas. También tiene un efecto diurético, por lo que la menta ayuda al organismo a liberar el exceso de líquidos. Esta liberación hace que se reduzca la hinchazón del cuerpo y la retención de líquidos.
Mejora de la salud respiratoria
El té de menta puede ser beneficioso si sufres de congestión nasal, sinusitis o resfriados. Sus propiedades expectorantes y descongestionantes pueden ayudarte a aliviar la congestión y mejorar tu salud respiratoria.
Por todos estos beneficios del té de menta estamos ante en una bebida muy recomendada para incluir en cualquier dieta incluso para tomar a diario. Además, tiene mucho sabor y aporta frescor, lo que la hace muy apetecible. Así que, ¿por qué no disfrutar hoy mismo de una taza de té de menta?